La eficiencia es el camino del mundo en estos días, pero ocasionalmente, los atajos en los “trucos de vida” pueden omitir pasos críticos en un proceso importante. Un ejemplo de ello es no limpiar antes de desinfectar.

Mucha gente cree correctamente que la desinfección y la limpieza van naturalmente de la mano, pero asumen que los desinfectantes limpian eficazmente una superficie y eliminan los gérmenes. Este es un concepto erróneo peligroso y un atajo que puede exponer su hogar a patógenos que causan enfermedades.

¿Por qué limpiar primero?

La Agencia de Normas Alimentarias (FSA) recomienda que las superficies se limpien antes de desinfectar, para que los patógenos que causan enfermedades no tengan un lugar donde esconderse. “Los desinfectantes químicos solo funcionan si las superficies se han limpiado a fondo primero para eliminar la grasa y otra suciedad”, explican.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) están de acuerdo y establecen que “la limpieza funciona mediante el uso de jabón (o detergente) y agua para eliminar físicamente los gérmenes de las superficies. Este proceso no necesariamente mata los gérmenes, pero al eliminarlos, reduce su número y el riesgo de propagar infecciones “.

Además, los CDC aclaran que la limpieza y la desinfección van de la mano, y para descontaminar completamente una superficie, se deben implementar ambos pasos. “Este proceso no necesariamente limpia las superficies sucias o elimina los gérmenes, pero al matar los gérmenes en una superficie después de la limpieza, puede reducir aún más el riesgo de propagación de infecciones”, establecen.

Por ejemplo, si está horneando un pastel, es muy probable que el mesón de su cocina esté cubierta de residuos de huevo, harina, azúcar y otros ingredientes. Esto puede conducir fácilmente a la contaminación por Salmonella, que puede causar enfermedades graves. Para eliminar por completo este riesgo, es importante limpiar primero con un limpiador universal como Simple Green, limpiando la superficie para eliminar la suciedad visible. Luego, puede usar un desinfectante para eliminar los gérmenes persistentes. Pero no todos los desinfectantes son iguales, así que asegúrese de seguir las instrucciones de la etiqueta para los procedimientos de desinfección adecuados.

El entorno menos amigable para que prosperen los patógenos es una superficie limpia y seca expuesta a la luz y al aire. Al limpiar superficies, quitar la suciedad y tallar con el limpiador en áreas porosas o grietas como baldosas y lechada ayuda a sacar esas bacterias indeseables de su “escondite”, por así decirlo. Luego, pueden eliminarse correctamente con un desinfectante, siempre que se sigan las instrucciones de la etiqueta y los tiempos de permanencia adecuados.

La Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. (EPA) advierte que no debe tomar un atajo directo al desinfectante: “Los gérmenes pueden esconderse debajo de la suciedad y otros materiales en superficies donde no se ven afectados por el desinfectante. La suciedad y el material orgánico también pueden reducir la capacidad de matar gérmenes de algunos desinfectantes “.

Recuerde, los desinfectantes no limpian, y los limpiadores no desinfectan.

Hay un buen número de productos limpiadores / desinfectantes combinados en el mercado que ofrecen una solución de un solo paso al proceso de dos pasos recomendado. Si bien los limpiadores y desinfectantes dos en uno son algo efectivos para levantar la suciedad y eliminar los patógenos a nivel de la superficie, estos productos no son efectivos para limpiar y desinfectar completamente de una vez. Con frecuencia, las instrucciones recomiendan aplicar estos productos a “superficies previamente limpiadas”.

“L ANTES de D”

Como regla general, recuerde “L” (limpiar) antes de “D” (desinfectar), o “LAD”, para abreviar. Debe limpiar la superficie con un limpiador doméstico para eliminar cualquier alimento o partículas o líquidos de desecho visibles. Luego, una vez que haya limpiado completamente la superficie, debe aplicar el desinfectante de acuerdo con las instrucciones de la etiqueta.

A medida que el público se vuelve más consciente de los riesgos y las medidas de protección necesarias para la prevención de enfermedades en un mundo afectado por una pandemia, la información es su mejor arma contra la contaminación no deseada. Seguir el método de limpieza y desinfección “LAD” le ayudará a mantener un hogar más limpio y saludable.